El ministro de Economía, Luis Caputo, y su secretario de Comercio, Pablo Lavigne, almorzarán este lunes con el Comité Ejecutivo de la Unión Industrial Argentina, que encabeza su presidente, Daniel Funes de Rioja. La agenda de temas se centrará en la deuda comercial que tienen las empresas con proveedores internacionales, aunque la gran preocupación de las fábricas es el flujo de insumos y bienes que podrían paralizar la producción, ante el stop de entregas por falta de pagos.
El convite se realizará en la sede porteña de la UIA desde las 13, según confiaron fuentes empresarias consultadas por PERFIL. “Vamos a ver qué nos cuentan y qué pasará con la deuda comercial, ya que no nos embarcan por falta de pago. A partir de ahí, también queremos tener un cronograma de cómo seguiremos”, afirmó uno de los integrantes de la mesa chica fabril, que participará del cónclave.
Caputo lleva su cronograma de pagos en bonos
Según trascendió desde el quinto piso del Palacio de Hacienda, Caputo lleva consigo un cronograma de acceso al Mercado Único de Cambio (MULC) por posición arancelaria, con fecha de liquidación entre 30 y 120 días. También, se abrirá desde este lunes y por una semana un padrón de reconocimiento de deuda comercial. Aún faltan definiciones sobre los bonos que se ofrecerán para extender el plazo de la deuda en stock.
Si bien quedó establecido que el BCRA emitirá deuda para pagar la deuda comercial en dólares, todavía no están definidas las alternativas de bonos para ese saldo impago. Lo que sí está claro que el primer Bono para la Reconstrucción de una Argentina Libre (BOPREAL) será largo, para el último trimestre del 2027, justo cuando se define la reelección de La Libertad Avanza.
De la reunión que se realizó el jueves de la semana pasada, trascendió que el primer financiamiento en bonos será destinado a las pymes, pero que no contará con ninguno de los beneficios que las grandes empresas reclaman para hacer tentadores a los bonos. Esa decisión estará en la mesa de los industriales, que llevarán un esquema propio de aporte, como ya lo hicieron otras entidades la semana pasada.
“En paralelo al sinceramiento cambiario, el BCRA anunció que se ofrecerán títulos de deuda a suscribir voluntariamente en pesos y pagaderos en dólares (BOPREAL) dirigidos a importadores que registren deuda comercial. La medida apunta a reprogramar hacia adelante el acceso a los USD en el MULC asociada a la cancelación del crédito comercial acumulada principalmente desde 2022 (próximo a los USD 30.000 M entre bienes y servicios), señaló un informe de la consultora Ecolatina.
Alerta por el efecto inflación en el derrumbe de las ventas
No será Caputo el que ponga el tema precios entre los comensales, sino que la preocupación está en los industriales. Sucede que existe una dispersión de pensamientos en el ala fabril, porque los productos que tenían sus precios pisados por el desaparecido programa Precios Cuidados e, incluso, aquellos que seguían el sendero de aumentos permitidos, se desataron y remarcaron fuertemente. Otros, decidieron hacer correcciones de manera más gradual.
Sucede que el derrumbe en las ventas puso en alerta a los fabricantes de productos que no son de primera necesidad. Mientras que las alimenticias remarcaron “sin control”, las bebidas debieron autocontrolarse. El acuerdo que surgió entre los exportadores de carne del Consorcio ABC y los supermercados, para vender cortes parrilleros a bajos precios, es una referencia para el funcionamiento futuro. Si bien lo comunicó el secretario Lavigne, las negociaciones quedaron en manos privadas. De hecho, se esperan para estas fiestas una ola de promociones y descuentos en grandes superficies comerciales, como también en negocios de cercanía, según pudo saber PERFIL.
¿Cuál es el temor? Que la inflación y la recesión paralice fábricas, y la importación de insumos sea una anécdota. “Proyectamos una inflación promedio mensual rondando 25% en diciembre, enero y febrero, que deteriorará el poder adquisitivo de los ingresos laborales. La caída del salario real de diciembre de 2023 podría superar la contracción de 9% verificada en abril de 2002”, alertó un informe de la consultora Equilibria.