En la actualidad menos del 2% de todos los conocimientos de embarque (BL) emitidos son electrónicos
El comercio mundial implica varios procesos en los que se intercambian hasta más de 20 documentos para un solo envío entre las distintas partes interesadas de la cadena. Durante años, la documentación del comercio mundial se ha caracterizado por los documentos físicos que se emitían, liberaban, entregaban e intercambiaban personalmente o mediante servicios postales y de mensajería, evolucionando hasta que ciertos documentos se transmitían y eran aceptados por fax o correo electrónico, señala un reporte de Shipping and Freight Resource.
Sin embargo, algunos documentos, como el conocimiento de embarque (BL), siguen siendo necesarios en formato físico en hasta el 40% de las transacciones comerciales de transporte marítimo.
Se debe recordar que el BL es uno de los documentos comerciales más importantes en la cadena de suministro al cumplir tres funciones: es un documento de titularidad, proporciona evidencia del contrato de transporte y actúa como recibo de los bienes. Además, muchas veces se emite también como un documento negociable, e implica una tarea bastante ardua para su emisión, liberación, endose y transferencia en formato de papel.
Digitalización de los documentos comerciales
La digitalización de la documentación comercial ha surgido como un paso importante para reducir costes, ahorrar tiempo y mejorar las transacciones comerciales, al tiempo que mejora la resiliencia de la cadena de suministro y ayuda a mitigar futuras interrupciones.
Aunque actualmente existen varios programas y tecnologías para la digitalización de la documentación comercial, hay que dar la debida importancia al aspecto jurídico de la implantación y el uso de la documentación comercial electrónica frente a la documentación física en papel.
Si se toma el BL como ejemplo, en el mundo electrónico se tienen al menos dos problemas desde el punto de vista legal. Uno es la originalidad y el segundo es la singularidad del documento.
Un documento electrónico puede tener diferentes soportes por lo que, desde el punto de vista legal, es necesario que haya un mecanismo que demuestre que se trata del único documento en circulación y que no ha sido modificado desde su emisión.
Aunque el trabajo sobre los e/BL comenzó con Bolero a finales de los años 90, con muchas empresas trabajando con diferentes sistemas para garantizar la originalidad y la unicidad del documento, desde 2021 hasta ahora menos del 2% de todos los BL emitidos son electrónicos.
Interoperabilidad entre proveedores de servicios
Con los documentos comerciales electrónicos, la interoperabilidad entre los proveedores de servicios de e/BL y sus sistemas era un problema.
Un “proveedor de servicios de e/BL” es una empresa que mantiene el sistema con un registro de eventos de creación y transferencia de documentos de titularidad entre usuarios registrados utilizando una plataforma tecnológica o un portal.
La transferencia legal del documento de una entidad a otra se produce cuando el documento se transfiere electrónicamente y se registra mediante el uso de un libro de contabilidad electrónico que puede ser una base de datos informática o una cadena de bloques.
Un BL, ya sea en papel o electrónico, es un documento de titularidad (dependiendo de cómo se emita) y, por tanto, está relacionado con la posesión del título.
En ese sentido es importante entender que el reconocimiento de la validez legal puede definirse a diferentes niveles. Puede aceptarse como una solución contractual entre usuarios de una misma plataforma digital, como derecho imperativo a través de un tratado internacional que resuelve cuestiones jurídicas abiertas, como un instrumento internacional ampliamente reconocido, o como simple derecho interno basado en el Ley Modelo sobre Registros Electrónicos Transferibles (MLETR).
Progreso de la documentación electrónica
En la actualidad existe una mayor actividad por parte de organizaciones como la Cámara de Comercio Internacional, la Organización Mundial del Comercio, la Asociación de Transporte Marítimo de Contenedores Digitales (DCSA), la CNUDMI, y otras, para impulsar la creación de marcos jurídicos fundamentales para la adopción de documentos comerciales electrónicos y normas para las transferencias de éstos.
Algunos países ya han puesto en marcha sus propias soluciones y han legislado los documentos comerciales electrónicos. Además, organismos de transporte y logística como la Federación Internacional de Asociaciones de Transitarios (FIATA), ya están realizando pruebas en vivo de interoperabilidad de la plataforma eBL con los principales bancos. Además, alianzas como Future International Trade Alliance (FIT Alliance), que es una colaboración entre DCSA, BIMCO, ICC y SWIFT, han firmado memorandos de entendimiento para estandarizar la digitalización del comercio internacional y la Comisión Bancaria de la CCI ha publicado recientemente la versión 1.0 de sus Reglas Uniformes para las Transacciones Comerciales Digitales (URDTT), un entendimiento colectivo de términos y definiciones para hacer posible que las transacciones comerciales se realicen completamente de forma digital.
Por MundoMarítimo