El denominado Grupo de Entidades Empresarias (Grupo de los Seis, G6) cuestionó la política económica aplicada por el Gobierno nacional y su impacto en la inflación y en los problemas para abastecer de dólares oficiales para normalizar las importaciones.
“El índice de inflación de enero viene a poner nuevamente en evidencia la ineficacia de las medidas adoptadas. El uso del tipo de cambio como ancla inflacionaria es hoy la causal directa de la restricción para la importación de insumos para la producción”, consideró la entidad en un comunicado.
El texto muestra la preocupación por el enfriamiento de la economía. “Por errores de concepto o por falta de decisión política para asumir los costos inherentes, la inflación es atacada sólo con herramientas artificiales e ineficaces, como los controles y acuerdos de precios y la estéril decisión de utilizar al tipo de cambio como ancla inflacionaria”, explicaron.
“El resultado es una creciente brecha cambiaria y una acelerada pérdida de reservas que no permiten atender a las necesidades de importación de insumos, repuestos y componentes, máquinas que en muchos casos servirían para hacer más eficiente o aumentar la producción y bienes terminados. El sistema establecido por el Gobierno para administrar las divisas disponibles no es sostenible en el tiempo, ya que la economía de un país no puede depender de la aprobación, operación por operación, de cada demanda de importación”, consideraron.
“Por otro lado, no hay criterios explícitos y claros que permitan a las empresas tener un mínimo de previsibilidad para organizar su producción y funcionamiento, sino que hay una dependencia del criterio arbitrario y discrecional de los funcionarios, que aún con su mejor buena voluntad, determinan qué importación es más o menos importante”, cuestionaron en el documento.
En ese contexto, el G6 señaló: “Reiteramos y abogamos por que se adopten correcciones urgentes y consistentes, empezando por el equilibrio fiscal y el control de la emisión monetaria y luego gestionando la restricción de reservas mediante un sistema que otorgue certidumbre a la producción”.
Fuente: Comercio y Justicia