Hay restricciones pese a que el sector genera dólares
En la urgencia que atraviesa el Gobierno nacional ante la falta de reservas de dólares, resulta ilógica la medida de trabar la importación de insumos a una industria como la minera, que los necesita para generar, justamente, mayores ingresos de la divisa norteamericana para el país.
Ese concepto subyace, paradójicamente, en el último informe publicado desde el propio Gobierno, por la Secretaría de Minería, sobre el balance comercial de los principales proyectos mineros del país. Allí se destaca que la relación entre las importaciones y las exportaciones de los proyectos mineros fue de 9,8% en julio pasado. Es decir que por cada cien dólares exportados, las mineras importaron menos de diez.
El cálculo de la dependencia nacional no puede ser inocente, dado que el principal reclamo de los últimos tiempos de los representantes de las compañías mineras a las autoridades del organismo oficial es por gestiones para que se liberen importaciones porque se están quedando sin stock de insumos para producir.
En Salta, hay dos sectores mineros en producción que están consumiendo sus reservas fundamentales para seguir en actividad. Así ocurre con la mina de oro Lindero que necesita importar cianuro, según reveló hace un par de semanas atrás a El Tribuno la flamante secretaria de Minería de la Provincia, Romina Sassarini. Y pasa lo mismo con el sector del borato, que requiere azufre (que solo se consigue en el exterior) también para el lixiviado.
“El proyecto Lindero tiene stock hasta antes de fin de año”, advirtió la funcionaria provincial y explicó que insisten en las gestiones con Nación para destrabar las importaciones.
De acuerdo al último relevamiento nacional, en julio el conjunto de empresas mineras mostraron un superávit comercial de US$251 millones. En el acumulado entre enero y julio, el balance comercial mostró un signo positivo por US$1.905 millones.
Fuente: El Tribuno