La Cámara Naviera Argentina, organización que representa a las empresas que prestan servicios marítimos en el cabotaje, emitió un comunicado horas atrás “en defensa de la ley de cabotaje y nuestra marina mercante nacional”.
“Resulta oportuno resaltar para quienes en nuestro país aún no comprenden la magnitud de sus propias manifestaciones atacando la Ley de Cabotaje, que la vigencia de la misma constituye el único sostén de la actividad naviera del país, aportando trabajo para nuestros hombres de mar, contribuyendo impositivamente al erario público, ahorrando divisas, pero en un plano significativamente superior, afirmando geopolíticamente a nuestra Nación, en nuestro litoral fluvial y en el vital escenario marítimo del Atlántico Sur”, arranca la misiva.
El texto no explica a quiénes se refiere, así como tampoco si está dirigida a alguien en particular.
Sentido del cabotaje
Continúa: “En tiempos recientes han surgido endebles e interesados argumentos tendientes a lesionar el sentido del cabotaje, en aras de un marcado sesgo de transitorias ventajas comerciales, algunas de ellas amparadas en el actual desequilibrio cambiario. Así se han observados intentos semejantes en la Hidrovía Paraguay-Paraná, y casos aislados en puertos, zonas de alije y completamiento de carga dentro de nuestra jurisdicción marítima. A ello se suma ahora la idea de considerar al contenedor vacío como ajeno a la carga, y por lo tanto no alcanzado por las normas legales en vigor, incluyendo las normas imperativas del Código Aduanero”.
De acuerdo con la ley de cabotaje, “la navegación, comunicación y comercio de cabotaje nacional serán practicados únicamente por barcos argentinos”. Así lo destaca el artículo 1 del decreto/ley 19.492/44.
Extremas
“En este accionar mediático -sigue la Cámara- hay voces extremas que procuran afirmar que el cabotaje sólo debe comprender el transporte de cargas domésticas, con lo cual no abarcaría los movimientos de transbordo, ya sea en contenedores vacíos o llenos, cargas líquidas y secas. Esta tendencia, impulsada por importantes navieras internacionales, con costos amparados bajo banderas de conveniencia, lamentablemente encuentran interesado eco en algunos cargadores y operadores portuarios, con el objetivo de lograr que el fuero nacional finalice al pie del muelle, terminando de destruir la flota de bandera argentina y resignando la soberanía marítima y fluvial del país”.
“La Cámara Naviera Argentina reitera su firme posición de defensa de las leyes que rigen nuestro quehacer y que establecen su marco legítimo, dentro del ordenamiento jurídico en que se desarrolla la totalidad de la economía nacional. En tal sentido reconocemos a las autoridades del sector en su accionar, velando por el estricto cumplimiento de las normas legales vigentes que impiden el avasallamiento de nuestros derechos como navieros nacionales. Si hay empresas extranjeras que quieran competir lealmente en nuestro país las invitamos gentilmente a que inviertan en la Argentina incorporando buques a la flota de bandera nacional, creando nuevas fuentes de trabajo para nuestros marinos mercantes, aportando al fisco nacional y desistan de incursionar en nuestras aguas en el cabotaje argentino utilizando buques con ventajas laborales, impositivas o bajo banderas de conveniencia”, culmina el texto de la cámara que agrupa a los armadores argentinos.
Emiliano Galli (Trade News)