El acusado simuló despachar placas de video para criptominería, pero eran carcasas vacías que apenas alcanzaban los USD 30 mil

Un empresario fue procesado por parte de la Justicia federal debido a supuestas irregularidades relacionadas con la importación de productos tecnológicos de bajo valor agregado. En este caso, se lo acusa de declarar un precio de aproximadamente USD 1.5 millones, mientras que el valor real de los productos se estima en alrededor de USD 30 mil.

El propietario de la empresa identificado como M.W, de 54 años y residente en Martínez, quien ocupa cargos en varios directorios de empresas relacionadas con la tecnología y su agente de despacho, fueron denunciados por la Dirección General de Aduanas ante el Juzgado Federal de Río Grande. La denuncia se basa en una presunta operación fraudulenta en la que se simuló la importación de placas de video destinadas a la minería de criptomonedas, aunque en realidad se trataba de carcasas vacías.

Según informantes oficiales, el empresario tenía la intención final de enviar ilegalmente divisas al extranjero. Los expertos de Aduanas señalaron que la operación fue declarada con un valor superior a los USD 1.400.000.

Las autoridades aduaneras sospechan que el individuo procesado se benefició del régimen especial de Tierra del Fuego, donde tiene establecidas varias de sus empresa. Esto habría sido hecho con el propósito de obtener dólares al tipo de cambio oficial, los cuales presumiblemente habrían sido transferidos a una cuenta de su empresa en el estado de Delaware, Eestado Unidos. Este estado se caracteriza por tener tasas tributarias bajas y una reticencia al intercambio de información fiscal.

Frente a esta situación, la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia ratificó el procesamiento de ambas personas denunciadas. Además, impuso un embargo de $50.000.000 al titular de la empresa y un embargo de $30.000.000 al despachante de aduana involucrado.

Además, en el caso de que se confirme la culpabilidad de los dos procesados en esta maniobra fraudulenta, podrían enfrentar penas de prisión que oscilan entre 2 y 10 años, según lo establecido en los artículos 864 y 865 del Código Aduanero. Además, si se comprueba la irregularidad de la operación, la Aduana podría imponer multas superiores a los USD 5 millones, según informaron desde dicha entidad.

La práctica de sobrefacturación en importaciones se basa en un procedimiento destinado a engañar a las autoridades fiscales al declarar un valor significativamente mayor al real de los productos importados, con el propósito de obtener dólares a la tasa oficial según informó Infobae.

La respuesta oficial ante el caso del empresario

“El objetivo de la maniobra es usar la importación como pantalla para una operación financiera. Consiste en obtener dólares a valor oficial y colocarlos en el exterior —fuga indebida de divisas e impacto sobre reservas del BCRA”, señalaron desde la Aduana.

Debido al incremento en la cantidad de casos, la entidad implementó una serie de medidas con el objetivo de disuadir esta conducta.

Por ejemplo, en marzo de este año, un equipo de agentes especializados de la Aduana-AFIP examinó cinco operaciones de importación de maquinaria realizadas por un destacado laboratorio argentino y detectaron una “sobrefacturación flagrante”.

Según un comunicado oficial, la entidad encabezada por Guillermo Michel presentó la denuncia, y la Justicia en lo Penal Económico ordenó la realización de allanamientos en dos propiedades, donde se incautó documentación de interés para la investigación.

Según información proporcionada por la Aduana, las transacciones fueron declaradas en Argentina por un total de aproximadamente USD 5 millones. No obstante, se descubrió que las exportaciones de la maquinaria desde China se habían registrado a un valor de solo USD 555.920. Esto ha llevado a una investigación sobre una posible sobrefacturación de USD 4,484,040, lo que representa un aumento del 907%.

La Aduana se percató de la refacturación de la mercancía a través de una empresa en Panamá, a pesar de que la mercancía había sido enviada directamente desde China a Argentina. Es importante destacar que, desde la perspectiva de la Aduana, las operaciones trianguladas son legales y comunes en el comercio internacional, aunque también representan un indicador de riesgo que debe ser evaluado detenidamente.

BR / Gi (Perfil)