En los primeros cinco meses de 2024, se acumula un saldo positivo de US$ 58 millones
La consultora ABECEB destacó que, en mayo, Argentina volvió a registrar un ligero superávit comercial en la balanza con Brasil. Fue de de US$ 23 millones, el tercero consecutivo luego de un balance positivo de US$ 111 millones en marzo y de US$ 116 millones en abril.
En los primeros cinco meses de 2024, se acumula un saldo positivo de US$ 58 millones, “una reversión de US$ 2.539 millones comparado con el déficit acumulado de US$ 2.482 millones” en igual período de 2023.
A su vez, el informe señala que el resultado se dio en el marco de una caída del intercambio bilateral. “Durante el quinto mes del año totalizó US$ 2.214 millones, marcando una retracción del 28,1% anual contra los US$ 3.077 millones de igual mes del año pasado”, advierte ABECEB. De esa manera se profundizó la tendencia a la baja del flujo comercial entre ambos países.
Las importaciones desde Brasil alcanzaron los US$ 1.095 millones en mayo y se redujeron 42,7% interanual en comparación con mayo de 2023 (US$ 1.913 millones).
Las exportaciones argentinas a Brasil alcanzaron los US$ 1.119 millones en mayo, una caída del 3,9% interanual, marcando un contraste con las subas registradas en abril (+36,7%) y en marzo (+2,8%). En el acumulado del año, han mostrado una suba de 1,2% anual.
Para el resto del año, la consultora señala que en un contexto de debilidad del nivel de actividad se espera que los niveles de importación se mantengan en niveles relativamente bajos en perspectiva histórica, efecto que dominaría por sobre la apreciación cambiaria derivada de un tipo de cambio oficial que se mueve por debajo de la inflación y de un real brasileño relativamente más depreciado.
Tampoco se avizoran cambios durante 2024 en el Impuesto PAIS ni en el dólar blend de exportación.
Un factor de rol ambiguo será el desempeño de la economía brasileña, que se espera que crezca 1,9% anual en 2024, desacelerando su crecimiento con respecto a 2023, pero mejorando perspectivas respecto a meses previos.
Esta desaceleración se explicaría principalmente por una desaceleración en el consumo privado pese al efecto rezagado de las bajas de tasas de 2023, y una merma en las exportaciones de soja ante las condiciones climáticas negativas en el sur del país.
“El año probablemente cierre con una balanza comercial bilateral relativamente equilibrada, con algunos meses puntuales de déficit bilateral (moderado) hacia fin de año, al compás de la tibia recuperación de la demanda interna”, proyecta ABECEB.
Fuente: El Economista