Agosto marcó un nuevo déficit comercial con Brasil de US$ 255 millones, el doble del registrado en agosto de 2021 (US$ 116 millones).

El saldo negativo se explica por un mayor crecimiento de las importaciones (+40%), que superaron los US$ 1570 millones. En tanto, las exportaciones también se incrementaron fuertemente (+31%), alcanzando los US$ 1315 millones.

De acuerdo con el análisis de la consultora Abeceb, el complejo automotriz (vehículos y autopartes) tuvo un notorio desempeño en sus importaciones, con aumentos interanuales cercanos al 104% (vehículos) y 56% (partes y accesorios): 1 de 4 dólares importados desde Brasil en agosto correspondieron a este sector.

En tanto, por el lado de las ventas a Brasil, todos los productos registraron incrementos en los embarques, destacándose los aumentos del rubro “leche y lácteos” con un crecimiento interanual de casi 253%, seguido por los “vehículos de carga” (43%), motores (40%) y autos (38%).

Por 4

“El déficit comercial bilateral acumulado hasta agosto fue de US$ 1960 millones, multiplicándose casi por 4 en relación con agosto 2021 (deficitario en US$ 599 millones). Dicho saldo fue consecuencia de importaciones que aumentaron muy por encima de las exportaciones (35 versus 19 por ciento) en lo que va del año”, indicó Abeceb.

“Esperamos que el rojo comercial continúe ampliándose en lo que resta del año para cerrar en torno a los US$ 2700 millones”, indicó la consultora, tras advertir que “no se descartan mayores restricciones a las importaciones en lo que resta del año, lo que reduciría el déficit bilateral anual”.

Por su parte, Ecolatina destacó que estamos ante “el octavo mes consecutivo de déficit comercial bilateral” con Brasil, no sin destacar que las exportaciones registraron “el tercer valor más alto de los últimos 9 años”.

“Las ventas de vehículos (tanto para el transporte de mercaderías como para pasajeros) se incrementaron en su comparación interanual (+41%) y explicaron un 37% de las ventas a Brasil, totalizando poco menos de US$ 490 millones”, explicaron.

Sin embargo, la Argentina sigue perdiendo peso en el total de las importaciones que realiza su principal socio comercial: en 2000 representaba un 12% del total de las compras brasileñas; ahora orillan el 4,7%.

Mercado brasileño

“Habrá que monitorear no sólo los factores de índole interna, como la continuidad de las restricciones a las importaciones, sino también a los eventos que ocurren en Brasil. Particularmente, será crucial seguir de cerca la dinámica electoral de la campaña presidencial y sus respectivos resultados, dado que sin dudas repercutirán tanto en la esfera financiera como en la real”, valoraron desde Ecolatina

A propósito, señalaron que el mercado brasileño viene ajustando al alza el crecimiento esperado para 2022 (por encima del 2%), “pero a la baja para 2023 (por debajo del 0,5%), lo que, si bien puede ayudar en el corto plazo, implica cierto pesimismo para nuestras exportaciones de cara al año próximo”.

En los últimos 17 años, la Argentina sólo registró superávit comercial con Brasil en 2019. “La persistencia del déficit bilateral encuentra su explicaron en un estancamiento de las exportaciones argentinas, que fueron perdiendo representación en las importaciones de Brasil al pasar de promediar US$ 14.700 millones entre 2008 y 2014 a poco más de US$ 10.000 millones entre 2015 y 2021; y por un elevado piso de importaciones”, concluyeron.

Fuente: Trade News

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