El mercado empieza a sacar cuentas sobre la disponibilidad de dólares, ya que con menos ingresos previstos de la cosecha, la perspectiva que se avizora es que se agudizarán las restricciones para las importaciones.
Los analistas de mercado estiman que el promedio mensual de dólares asignados será casi un 20% menor al del año pasado. Qué consecuencias se esperan
Las importaciones crecieron un 29% en el 2022. Por otro lado, el BCRA no tiene alternativa que mantener el control de cambios.
Por eso se calcula que las importaciones se tendrían que reducir aproximadamente en unos USD 4000 millones por mes, algo que parece imposible, ya que el año pasado, las importaciones promediaron los USD 6700 millones mensuales.
La balanza comercial en el 2022 fue de USD 6923 millones, la mitad de los USD 14.751 millones del año anterior.
Las importaciones crecieron un 29% y marcaron USD 81.500 millones, mientras que las exportaciones sólo crecieron un 13,5%, solo unos USD 88.500 millones.
Impacto en precios y en la actividad económica
En el 2022 hubo una fuerte caída en las importaciones y esto puede generar impacto en precios y actividad económica.
Hubo un menor ingreso de las exportaciones y por el aumento de los controles en las importaciones -que seguirán- podría profundizarse aún más, en el mediano corto plazo.
Esto traerá consecuencias negativas directas e indirectamente sobre los precios y el crecimiento de la actividad.
Para este año prevén exportaciones en torno a los USD 81.000 millones, menos del 8,1% anual, y estiman importaciones cercanas a los USD 77.000 millones, menos del 5,5% anual, lo que dejaría un superávit de USD 4000 millones.
Si el campo no aumenta la oferta exportable, lo más probable es que el BCRA reforzará el control de cambio.
Recordemos que existe un alza de la deuda comercial por la diferencia entre las importaciones efectuadas y pagadas, que rondan aproximadamente unos USD 8000 millones y la mitad son con las casas matrices.
Si el país no regulariza su deuda, esto generará un riesgo en los mercados, ya que esto tendrá impacto en sus inversores y en el financiamiento.
Por ende, si caen las importaciones, lo más probable es que de manera natural caigan las exportaciones.
La economía productiva
Cabe destacar que el 85% de lo que se importa son insumos y bienes para la producción.
Luego también se importan máquinas, repuestos y combustibles.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) propone desacelerar la demanda, pero para eso Argentina necesita ajustarse, ser más recesiva, no gastar más dinero que le ingresa para asegurar la paz cambiaria.
El ingreso de dólares por visitantes a la Argentina por el turismo, no alcanzará a cubrir la diferencia en importaciones.
Este saldo comercial del 2023 probablemente encuentre una reducción a causa de los efectos de la sequía que reducirán las exportaciones
Por otro lado, el Gobierno ya decidió destinar USD 1000 millones de lo que representa el ahorro de importaciones de energía a la recompra de deuda.
Para finalizar, el gasoducto (Néstor Kirchner) quien se pondría en marcha el 20 de junio de este año, según dichos del Presidente, podría compensar parcialmente el resultado comercial con una reducción de las importaciones de energía.
Se estima un ahorro cercano a los USD 2500 millones por las compras y precios de combustibles.