En el acumulado anual, el saldo comercial llegó a US$ 10.708 millones. Es una mejora muy importante con respecto al mismo periodo del año pasado
El Indec informó hoy que las exportaciones argentinas fueron de US$ 6.590 millones en junio. En tanto, las exportaciones fueron de US$ 4.679 millones.
Los envíos al exterior crecieron 21,7% en junio y las compras al mundo se desplomaron 35,4%. En el primer semestre, las exportaciones crecieron 14% y las importaciones se desplomaron 27,7%.
El desplome importador de junio fue realmente importante. “Es la segunda peor contracción en los últimos quince años”, dijeron en Abeceb.
Debido al incremento del 21,7% en las exportaciones y la disminución del 35,4% en las importaciones, el saldo comercial de junio alcanzó un superávit de US$ 1.911 millones. En contraste, en junio de 2023 se había registrado un déficit de US$ 1.833 millones.
“Implica una reversión de US$ 3.744 millones respecto al déficit comercial de US$ 1.833 millones registrado en igual mes de 2023”, dijeron.
En el acumulado anual, el saldo comercial ya llegó a US$ 10.708 millones y se mantiene entre los más altos para el mismo tramo de las últimas tres décadas. Es una mejora muy importante con respecto al mismo periodo del año pasado: en aquel entonces, el rojo era de US$ 4.493 millones.
Más detalles
Las exportaciones aumentaron 21,7% respecto a junio (US$ 1.175 millones), debido principalmente a un incremento de 30,2% en las cantidades, ya que los precios registraron una caída de 6,6%. En términos desestacionalizados, las ventas al exterior disminuyeron 2,7% y la tendencia-ciclo aumentó 0,6%, con relación a mayo de 2024.
Las importaciones descendieron 35,4% en comparación con junio de 2023 (US$ -2.569 millones), debido a caídas tanto en las cantidades como en los precios, que fueron de 34,5% y 1,7%, respectivamente. En términos desestacionalizados, las compras al exterior disminuyeron 2,2% y la tendencia-ciclo, 1,5% en comparación con mayo de 2024.
En el frente exportador, los valores exportados crecieron exclusivamente debido a un boom de aumento en las cantidades exportadas (+30,2%), en tanto que los precios de exportación cayeron 6,6% anual. “El fuerte incremento en las cantidades exportadas fue traccionado principalmente por los Productos Primarios (+62,8%, donde incidió claramente la reversión del efecto sequía) y por las Manufacturas de Origen Agropecuario, que creció en cantidades un 27,2% anual. Esta fuerte mejora en las ventas del agro pudo verse en la fuerte suba de los valores enviados de semillas y frutos oleaginosos del 308,6% anual (a US$ 708 millones), pese a la caída de los envíos de cereales de 13,4% anual. En tanto, el rubro Combustibles y Energía vio sus envíos crecer 15,9% anual en cantidades y 7,1% en precios (es decir, un aumento total del 24,2% anual)”, apuntó Abeceb.
Deterioro en los términos del intercambio
Si hubieran prevalecido los precios de junio del año pasado, el saldo comercial habría arrojado un superávit de US$ 2.293 millones. Es decir, se deterioraron los términos del intercambio, “debido al mayor descenso del índice de precios de las exportaciones (-6,6%) en comparación con el índice de precios de las importaciones (-1,7%)”.
Los números de 2024
Cerrado el primer semestre con un superávit comercial superior a los US$ 10.000 millones, “es de esperar que la tendencia creciente de las exportaciones en cantidades se mantenga, aunque principalmente impulsada por los sectores agroexportador y petrolero”, dijeron en Abeceb.
Pese a eso, la estacionalidad desfavorable en la segunda mitad del año implicará superávit comercial decreciente. Esto viene en suma a las importaciones en modesta recuperación en el margen, ya que las mismas acompañan a un repunte en la actividad que parece incipiente pero aún se hace esperar.
Según sus proyecciones, el superávit comercial estará en torno a US$ 18.000 millones en 2024, en contraste con un déficit de US$ 6.926 millones en 2023.
Fuente: El Economista