Se dice que el comercio exterior es una avenida de doble vía, donde para poder exportar hay que poder importar. Por eso en tiempos de cepo y falta de dólares vemos igualmente afectada la importación como también la exportación.

Para intentar sortear la dificultad financiera asociada a la crisis de dólares, desde la Zona Franca La Plata hay operadores que impulsan replicar el régimen de importación temporaria en el enclave franco, y así poder luego exportar el producto.

Por ejemplo, desde la importación de baterías para agregar a un vehículo eléctrico hasta el cambio de enchufes en determinados productos. Incluso, el etiquetado de prendas o calzado.

Importación temporal

Guadalupe Sola, directora general de Jidoka, uno de los usuarios de zona franca, explicó que “las importaciones temporales son aquellas importaciones de insumos que no pagan derecho de importación porque tienen como objetivo formar parte de un proceso productivo que tiene la finalidad de exportar dicho producto”.

Según indicó, el régimen se rige “por el decreto 1330/04 y (las solicitudes) van acompañadas de un certificado de tipificación que es un documento que se tramita ante la Secretaría de Comercio donde se informa cuál es la relación entre ese insumo que se ingresó temporalmente con el producto que se va a exportar”.

“Lo que estamos promocionando ahora es la posibilidad de aplicar este decreto dentro del predio de la Zona Franca La Plata”, agregó.

Opciones

Sola explicó que existen dos opciones para replicar el decreto en el enclave franco: “La primera opción es generando un proceso productivo dentro del predio franco, es decir, se ingresa el insumo y se genera el proceso productivo; una vez finalizado el producto se lo debe exportar el 100%. La segunda opción es ingresar el insumo dentro en zona franca y, una vez que tengo el ingreso, decidir qué hacer con ese insumo: dependiendo de las posibilidades comerciales, una parte para importación temporal para una fabricación y posterior exportación, o una parte se ingresa a consumo”.

“Al tener la mercadería ya dentro del predio se puede decidir qué hacer en función de la oportunidad comercial que se presente. De tal manera puedo evitar los vencimientos del certificado de tipificación, los extracostos, los derechos  y las multas y todo lo que hace al normal funcionamiento de una importación temporal”, amplió la ejecutiva.

De esta manera, se sumarían los beneficios fiscales y financieros que ofrece la zona franca a una realidad difícil que enfrenta el comercio exterior en la actualidad.

Emiliano Galli (Trade News)

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