Este resultado equivale a una merma del 13% en relación a noviembre y del 19% en términos interanuales. En la comparación mensual, lo que más cayó fueron las compras de piezas y accesorio para bienes de capital (22%), seguido por bienes de capital (18%) y bienes intermedios (11%). Estos guarismos coinciden con los datos de la desaceleración de la actividad económica durante la última parte del año pasado. Las compras de bienes de consumo aumentaron el 1% durante el último mes del año.

El 2022 estuvo signado por los fuertes pagos en el rubro combustibles y energías, cuyos precios se dispararon a partir del inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania. Esta situación llevó a que dicho rubro pasara a representar el 20% del total de las importaciones durante los meses de invierno, según los registros oficiales. Con los cambios de temperatura, las necesidades energéticas decrecieron y pasaron a representar el 10% del total de bienes adquiridos en el exterior.

Los fuertes pagos de energía complicaron la estrategia de acumulación de reservas del BCRA. En el año se fueron por este concepto USD12.859 millones, un incremento del 120% en la comparación interanual. Sin embargo, este rubro representó en diciembre una merma del 38%. Desde el Gobierno confían en que la balanza energética deficitaria empezará a equilibrarse con la inauguración del Gasoducto Néstor Kirchner, previsto para junio de este año.

Si se observa el resultado del acumulado del año, los incrementos totales de las importaciones según los datos oficiales no condicen con los cuestionamientos del sector privado sobre la falta para acceder a los dólares reclamados por los diferentes sectores productivos. Sin embargo, en noviembre hubo una baja en todos los rubros vinculados a la industria, caída que se potenció sobre el cierre del año.

En el desagregado del acumulado del 2022, los bienes de capital finalizaron con un alza del 22%, aunque muchas máquinas fueron adquiridas en la primera parte del año como reserva de valor frente a la incertidumbre por el tipo de cambio. Las compras de piezas y accesorios registraron un alza del 26%, mientras que los bienes intermedios lo hicieron con un 17% interanual.

Desde el Banco Central se profundizó en los esquemas de financiación de importaciones para evitar el drenaje de reserva y no entorpecer los niveles de actividad. A noviembre, el stock de financiamiento llegaba a los USD7300 millones.

Sin embargo, en los resultados de diciembre ya se pudieron observar los límites impuestos por el nuevo sistema de control de las importaciones, ya que no solo hubo una fuerte caída en el rubro energético. Las importaciones de bienes durante el último mes del año marcaron el menor valor del 2022 y el registro mínimo desde abril de 2021.

En octubre, el total importado había sido de 6074 millones, mientras que en noviembre fueron 5750 millones. Para diciembre, el guarismo terminó en los 5008 millones. La caída no es solo mensual sino también en la comparación interanual, con una merma de bienes de capital del 25%, una caída del 19% en bienes intermedios y del 11% para piezas y accesorios.

Por Sebastián Premici (Bae Negocios)