Son tratados de libre comercio por fuera del bloque  y provoca rispideces entre los socioes

La motosierra que volvió a ostentar Javier Milei desde su despacho no sólo sirve para exhibirla a los aliados y refrescarles su carácter. Fue parte de su construcción como dirigente de la nueva derecha global que lo llevará el próximo miércoles a brindar el discurso de cierre (a las 19) en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) Buenos Aires. Y es la impronta con la llegará el jueves y viernes a la cumbre del Mercosur en Montevideo.

Se sentará por primera vez en esa mesa tras ausentarse en Paraguay con varias piezas de la macroeconomía ordenadas, de acuerdo a su plan de estabilización, y habiendo dado algunas muestras de pragmatismo como la reciente en el marco del G20, cuando se saludó fríamente con su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y a la vez la Argentina firmó un acuerdo para aumentar las exportaciones de gas de Vaca Muerta a ese país.

A la oposición local que no le da apoyo en el Congreso y a las recientes hostilidades con los aliados y dialoguistas, Milei sumará en Uruguay un cara a cara con los mandatarios de la región con los que acumula rispideces o cruces directos.

En ese marco, hay expectativa por la propuesta que llevará y que pondrá a prueba la unidad del bloque: habilitar a miembros a la firma unilateral de tratados de libre comercio (TCL) con otros países no miembros.

Milei busca sellar uno con los Estados Unidos y en la Rosada ya advierten que, por más que vaya en contra del reglamento del Mercosur, avanzará en ese sentido aunque le cueste la ruptura con los vecinos.

El TCL es uno de sus objetivos prioritarios para cuando asuma (el 20 de enero) Donald Trump en la Casa Blanca, junto con un nuevo acuerdo con el FMI que asegure fondos frescos por parte del Fondo Monetario Internacional que le permitan darle solidez al programa económico. La expectativa es que el FMI envié entre 10.000 y 15.000 millones de dólares como parte de un nuevo acuerdo de largo plazo que implique un plan progresivo de repago mientras se abren otras puertas de financiamiento en el mercado voluntario de deuda.

La reunión del Mercosur

La cita será el 5 y 6 de diciembre, en momentos en que sigue dilatándose la firma de un acuerdo de libre comercio con la Unión Europea, que acumula veinte años de negociaciones.

Uruguay ostenta la presidencia pro témpore del bloque regional, marcada por sus esfuerzos para que Mercosur se abra a otros mercados, el de China en particular. La cumbre tiene la expectativa de que asistan todos los presidentes de los países miembros.

En Asunción, donde tuvo lugar la última cita, no participó el gobernante argentino Javier Milei, lo cual fue objeto de crítica por Lacalle Pou. La 65ª reunión cumbre espera contar con la presencia de Lacalle Pou, Milei y los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil), Santiago Peña (Paraguay), Luis Arce (Bolivia) y José Raúl Mulino, jefe de Estado de Panamá, país que avanza hacia su integración como Estado asociado.

Fuente: Bae Negocios

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