La profundidad de los ríos llega a su mínimo histórico y se complica la navegación
El río Paraguay, uno de los principales cauces de agua de Sudamérica, alcanzó esta semana su nivel histórico más bajo en Asunción, en medio de la sequía extrema en su naciente del Pantanal brasileño y de pronósticos que presagian más dificultades para el tránsito fluvial los próximos meses.
El clima seco ha afectado el último año el transporte de granos por la hidrovía Paraguay Paraná, un corredor fluvial de más de 3400 kilómetros clave para las exportaciones que recorre la Argentina, Bolivia,
Brasil, Paraguay y Uruguay.
El nivel del río Paraguay en Asunción, medido en relación a un índice “cero” en el lecho del río, se situó en -0,82 metros el sábado, superando el mínimo histórico anterior de octubre de 2021, según datos de la Dirección de Meteorología e Hidrología. El organismo espera que el río siga bajando.
El río Paraná, en la Argentina, también está cerca de mínimos anuales en torno al centro portuario de Rosario. Los ríos Paraguay y Paraná nacen en Brasil para desembocar en el mar cerca de Buenos Aires y son rutas importantes para el transporte de soja, maíz y otros productos.
“En el tramo norte (de la hidrovía), la navegación está prácticamente interrumpida debido a las condiciones de bajante extrema”, dijo a Reuters la Cámara Paraguaya de Procesadores de Oleaginosas y Cereales (Cappro), cuyas empresas asociadas canalizan cerca del 60% de la soja cosechada en el país.
Según Cappro, el 82% del comercio paraguayo está vinculado a la Hidrovía y, en especial para la agroindustria, la ruta es considerada vital para llegar a más de 52 destinos globales. “Las embarcaciones tuvieron que transportar volúmenes por debajo del promedio de la capacidad de carga (…) se generaron demoras y se alargaron los tiempos de viajes”, agregó.
El impacto para la soja fue menor en comparación con otros sectores ya que el ciclo de procesamiento está finalizando, pero las perspectivas para los próximos meses no son alentadoras, dijo la cámara que tiene como asociadas a ADM, Bunge, Cargill y LDC, entre otras.
Fuente: La Nación