Importaciones y precios. Con esos dos temas al tope de la agenda, el ministro de Economía, Sergio Massa, y el titular del Banco Central, Miguel Pesce y el secretario de Comercio, Matías Tombolini, se reunirán este miércoles por la tarde con fabricantes de consumo masivo. El objetivo del encuentro “es negociar las necesidades de dólares de las compañías a cambio de que aumenten la producción en vez de subir los precios“, dijeron fuentes oficiales.

La expectativa en ambos lados es dispar. Desde el área económica aspiran a conocer de antemano los planes de importación de insumos y bienes de las compañías para lo que resta de 2022 y de todo 2023. Prometen dar respuesta a la demanda de divisas y de otro tipo a condición de que incrementen la producción y eviten desbordes de precios. Por su parte, las compañías llevarán su propio libreto.

“Las marcas líderes de consumo masivo dieron un respaldo muy fuerte y claro a Precios Cuidados. Ahora, durante la pandemia hubo un retraso en los precios de hasta 30% y en 2021 no se recuperó. Además, los costos de los commodities y la mano de obra siguen subiendo. Se está produciendo a la máxima capacidad para la demanda actual”, razonó una fuente calificada del sector.

Los fabricantes argumentan que el consumo se ameseta y que cae, “porque el salario real se está atrasando“, y que por eso el nivel de producción es adecuado para este contexto. En la previa, desde la secretaría de Comercio anticipan que la prioridad del Gobierno es cuidar las reservas del Banco Central y frenar el adelantamiento de importaciones, algo que incentiva la brecha cambiaria.

Tombolini cuenta con una herramienta clave para negociar con el sector privado: también quedó bajo su órbita la supervisión y aprobación de las SIMI, el trámite previo para ingresar mercadería desde el exterior. Su plan, tal como manifestó apenas asumió, es reformular una vez más el programa Precios Cuidados para que funcione como una guía de referencia en las góndolas.

Habló concretamente de retornar a la fórmula original (se implementó en 2014) y que contenga una canasta con productos de marcas líderes para que impacte en las principales categorías básicas.

“Lo que tenemos que intentar es encontrar acuerdos que sean estables a lo largo del tiempo, por lo menos un trimestre”, dijo, en “un contexto de enorme dispersión de precios”. Por otro lado, aseguró que “no habrá controles ni nada parecido” y que “se buscarán acuerdos y serán los propios consumidores los que fiscalicen el cumplimiento”.

Tombolini avanzó en las últimas semanas con acuerdos sectoriales, como lácteos y panificados, y en los próximos días será el turno del aceite. Este lunes, junto con la ministra de Salud, Carla Vizzotti, acordaron con laboratorios y farmacias renovar “el compromiso por parte del sector para colaborar y mantener una trayectoria predecible de precios de los medicamentos”.