Brasil y Argentina firmarán un acuerdo bilateral para la creación de un fondo de garantía para estimular las exportaciones brasileñas. Qué implica el nuevo acuerdo
La idea embrionaria de Brasil es la de un mecanismo de “compensación” como ya fue detallado en el pasado por el Fondo Monetario Internacional, con un modelo similar al que se adoptará con Argentina: la necesidad de depósitos en garantía con liquidez internacional para garantizar el financiamiento.
Además, el Gobierno brasileño quiere incluir requisitos, como que el país participante debería tener una inflación de un solo dígito y no podría estar en cesación de pagos, medidas para evitar lo que ocurrió con una cámara de compensación en la Unasur, el grupo sudamericano del cual Brasil salió durante el Gobierno de Jair Bolsonaro, cuando Venezuela dejó de honrar sus compromisos.
La elevada inflación argentina, que superó el 90% en los últimos 12 meses, no fue considerada una barrera para el acuerdo de financiamiento de las exportaciones.
Moneda común
El ministro brasileño de Hacienda, Fernando Haddad, restó importancia a la idea de una moneda única compartida entre Argentina y Brasil afirmando que los países están buscando formas de estimular el comercio bilateral, pero no de extinguir sus propias monedas.
Sus declaraciones se produjeron después de que el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y su par argentino, Alberto Fernández, publicaron un artículo conjunto en el que dijeron que su objetivo de una mayor integración económica incluía el estudio de una moneda común sudamericana.
Haddad, que planteó esa posibilidad en un artículo el año pasado, dijo que la eliminación de las barreras comerciales entre ambos países podría implicar el uso de una moneda única para el comercio, dada la falta de dólares en Argentina. Pero eso no significa el fin del real brasileño, afirmó.
“El comercio está muy mal y el problema es precisamente la moneda extranjera, ¿no? Así que estamos tratando de encontrar una solución, algo en común que pueda hacer crecer el comercio“, dijo Haddad a los medios a su llegada a Buenos Aires antes del primer viaje internacional de Lula desde su toma de posesión el 1 de enero.
Haddad señaló que Argentina es un importante comprador de productos industriales brasileños y que se están barajando “varias posibilidades” para sortear sus problemas de divisas, aunque no se había tomado ninguna decisión.
Al preguntársele si podía dar más detalles sobre la cuestión de las divisas, Haddad confirmó que aclararía el asunto en los próximos días, al decir irónicamente: “sobre todo porque hay quien dice que el real se va a acabar”.
Fuente: Ámbito