El regulador global del transporte marítimo dictaminó que los buques deben reducir drásticamente el contenido de azufre del combustible utilizado para los viajes en el mar Mediterráneo, como parte de los esfuerzos más amplios para limpiar la industria.
El contenido máximo permitido de azufre del combustible marino en la región caerá al 0,1%, probablemente a partir de la primavera de 2025, dijo un portavoz de la Organización Marítima Internacional (OMI). La decisión, tomada en la reunión virtual de la OMI de esta semana, establece un límite más estricto que el mandato global actual y reducirá la contaminación del aire, beneficiando la salud humana y el medio ambiente, según Bloomberg.
En 2020, la OMI redujo drásticamente el límite mundial de azufre en el combustible marino del 3,5 % al 0,5 %, lo que obligó a los transportistas a dejar de usar un producto viejo y sucio en el que habían confiado durante décadas o invertir en sistemas especiales de limpieza a bordo. Ese cambio anticipado provocó fuertes movimientos de precios en algunos mercados de combustible y generó preocupaciones sobre la disponibilidad de combustible y la seguridad de los barcos, aunque esos temores resultaron ser en gran medida infundados.
La última regla cubre un área mucho más pequeña, pero aún podría tener algunos beneficios considerables. Está configurado para prevenir más de 1.000 muertes prematuras y 2.000 casos de asma infantil al año, según una propuesta que varios países, incluidos Francia, Italia y Turquía, presentaron a la OMI antes de la reunión.
“Debería haber suficiente disponibilidad de combustibles compatibles para esta nueva Área de Control de Emisiones. El gasóleo marino con un máximo de 0,1 % de azufre se ofrece en la mayoría de los lugares de suministro, tanto en el Mediterráneo como a nivel mundial”, dijo Unni Einemo, director de la Asociación Internacional de la Industria de Búnker, a principios de esta semana en la reunión de la OMI.
Más de 30.000 naves operan cada año en el Mediterráneo, una ruta recurrida por los petroleros y por barcos que transportan bienes de consumo y otros productos básicos como granos, según la propuesta. La contaminación del aire de los barcos afecta más que los puertos y las costas: también se transporta cientos de kilómetros tierra adentro.
“La carga sobre el transporte marítimo internacional es pequeña en comparación con las mejoras en la calidad del aire, las reducciones en la mortalidad prematura y las incidencias de salud asociadas con esta contaminación del aire y los otros beneficios para el medio ambiente”, comentaron los países en la propuesta. Ya existen áreas de control de emisiones que limitan el contenido de azufre del combustible marino al 0,1% en algunas otras regiones, incluidas América del Norte y el Mar del Norte.
La fecha precisa en la que entra en vigor la regulación para el Mediterráneo, después de la cual los barcos tendrán 12 meses antes de que deban comenzar a cumplir, se confirmará en otra reunión de la OMI este diciembre, donde la regla enfrenta el obstáculo regulatorio de adopción.
Fuente: PortalPortuario