Este año la agroindustria aportaría el récord de más de u$s41.500 millones. En los próximos tres meses se espera el grueso de los dólares de la soja, pero se proyecta un nutrido ingreso de divisas hasta diciembre
En lo que va de mayo las empresas agroindustriales liquidaron en el mercado de cambios local poco más de u$s3.400 millones y, faltando pocos día para que termine el mes, la estimación de la industria aceitera es que el total aportado sería de entre u$s3.800 y u$4.000 millones, cifra récord para este período del año. Pero eso no es todo, porque según las mismas proyecciones, entre mayo y julio los principales complejos agroindustriales (soja, maíz, trigo y girasol y cebada) aportarían más de u$s11.600 millones, una cifra que a pesar de las presiones que hoy tiene el BCRA dejaría mejor parada a la entidad para sumar reservas.
Lo cierto es que estos números son provisorios porque en el mercado internacional los precios de los granos no paran de subir ante el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania. La soja alcanzó este jueves los u$s634,38 la tonelada, mostrando un incremento de más de u$s16 por tonelada.
En tanto, también se abren oportunidades de negocios ya que Argentina como productora de alimentos podría salir al mundo a vender más granos ante la falta de Ucrania en el mercado del maíz y el trigo. Por lo pronto, la buena nueva es que India estableció un cupo de importaciones de aceite de girasol y soja con arancel 0% que beneficiará directamente a la Argentina ya que es proveedora de ambos productos.
De esta manera, con los números planteados, todo parece indicar que este año la economía argentina recibiría un nutrido ingreso de divisas pero también más gasto por importaciones de energía y fertilizantes, entre otros. Ese sería el escollo a sortear durante los próximos meses que serán claves y determinantes para lo que resta del 2022.