Los funcionarios firmaron un Memorándum de Entendimiento sobre Integración Económica y Financiera en el que se incluyeron, entre otras, dichas medidas en busca de incrementar un intercambio comercial que cayó cerca del 40% en los últimos 10 años. De todos modos, por el momento son declaraciones de intenciones sobre un camino a recorrer.

En ese sentido va el anuncio de un “programa de financiamiento de exportaciones recíproco”, que incluye un sistema de garantías para el cuál no fue especificado aún cuál será el monto en juego. Según explicaron, el mismo tiene por objetivo, en el caso de Brasil, aumentar el volumen y simplificar los trámites de las empresas para exportar a Argentina. Para las firmas locales, implica una mejora en el abastecimiento de las cadenas de valor en el marco de las restricciones vigentes al acceso a divisas para pagar importaciones, con un impacto en los niveles de actividad, y disminuir la carga del comercio bilateral en las reservas. Incluso permitirá a las compañías sortear el Sistema de Importaciones de la República Argentina (Sira).

El Banco do Brasil asume un compromiso con las empresas brasileñas y el Banco Nación asume un compromiso con las argentinas. Al aumentar la línea de crédito, el Banco do Brasil a 366 días, la obligación de pago de divisas se corre un año y un día, y ese es el impacto positivo que tienen las reservas del Banco Central argentino, porque la operación de pago es automática por parte del Banco Nación y el financiamiento en reales lo realiza el banco do Brasil a las empresas brasileras”, explicó Massa. Además, el ministro adelantó que la primera semana de febrero viajará al país vecino un equipo de Economía, más uno del Banco Nación, para comenzar las charlas sobre el nuevo régimen de garantías.

La semana siguiente a esa habrá un encuentro entre representantes de ambos Bancos Centrales para trabajar sobre un mejor funcionamiento del actual régimen de SML. En particular se buscará un mayor plazo para el arbitraje, que actualmente es de 30 días. Este fue uno de los pedidos que realizó la UIA y su par Brasileño CNI. En el largo plazo la intención es conformar un sistema de moneda común que incluya a otros países del Mercosur.

Por último, Haddad se comprometió a que el Banco Nacional de Desarrollo de Brasil (Bndes) financiará por USD820 millones la producción de insumos para el segundo tramo del Gasoducto Néstor Kirchner, particularmente a Usiminas del grupo Techint. Para Argentina implicará comprar más barato la chapa de los caños, mientras que Brasil se asegura que una de sus firmas gane la licitación y sobre todo la conexión entre Vaca Muerta y el sur de su territorio.