Con una expansión del 5,8% interanual, la economía argentina superó el pronóstico del FMI. El mayor impulso provino de la inversión y el consumo privado. El mensaje de Milei

El Producto Interno Bruto ( PIB) creció 5,8% interanual en el primer trimestre de 2025, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). En la medición desestacionalizada, marcó un alza del 0,8% respecto al trimestre anterior. El dato superó la proyección del Fondo Monetario Internacional (FMI), que a mediados de abril había estimado una suba de 5,5% para el período.

El presidente Javier Milei celebró la publicación del dato con un mensaje en sus redes sociales: “Fin del relato de periodistas basura (90%) y ensobrados. Parece que un crecimiento del 11,6% del consumo privado con un PIB que lo hizo al 5,8% es un tremendo dato. Pero el consumo cae ñañañañaña… Fin”.

El principal motor del crecimiento fue la Formación bruta de capital fijo, que aumentó 31,8% interanual. Dentro de este ítem, la inversión en maquinaria y equipo trepó 48,9% y la de equipo de transporte lo hizo en 74,7%. En ambos casos, el componente importado lideró el repunte: 64,5% y 66,2%, respectivamente. En cambio, otras construcciones cayeron 8,7%.

Desde el enfoque por la demanda, también subió el consumo privado (11,6% interanual), mientras que el consumo público registró una caída de 0,8%. Las exportaciones de bienes y servicios aumentaron 7,2%, pero las importaciones lo hicieron en 42,8%, lo que afectó la balanza comercial. En la comparación trimestral, el consumo privado creció 2,9%, la inversión 9,8%, y las exportaciones cayeron 1,5%.

Por el lado de la oferta global, el incremento fue de 13% interanual. En cuanto a la incidencia sectorial, los impuestos netos de subsidios mostraron el mayor impacto positivo (1,83 puntos porcentuales), mientras que el rubro Administración pública y defensa aportó la mayor tracción negativa al caer 1,2% (-0,66 p.p.).

Entre los sectores con mayor crecimiento se ubicaron Intermediación financiera (27,2%), Pesca (11,6%), Hoteles y restaurantes (9%), Comercio mayorista y minorista (7,3%), y Explotación de minas y canteras (6,6%). La industria manufacturera creció 5,1% y la construcción, 6,1%. En cambio, cayeron los servicios sociales y de salud (-0,6%), servicios comunitarios (-1,6%), hogares con servicio doméstico (-2,2%) y enseñanza (+0,5%).

Desde Balanz señalaron que “este dato contrasta con la estimación de actividad por oferta publicada el mes pasado (EMAE), que anticipaba un crecimiento del 1,5% trimestre contra trimestre”. La entidad explicó la diferencia por una moderación del crecimiento del PIB medido por demanda frente al medido por oferta, y atribuyó la desaceleración a la contracción de las exportaciones y el consumo público.

Más allá de los números oficiales

Por fuera de la medición oficial, el seguimiento de la actividad económica por parte de la consultora Orlando J. Ferreres mostró una suba de 1,3% mensual desestacionalizada en abril y un crecimiento interanual de 5,6%. Según el informe, la economía acumuló una mejora de 6,6% en el primer cuatrimestre del año.

En abril, siete de las once actividades relevadas por Ferreres mostraron crecimiento. Intermediación financiera lideró con una suba interanual de 29,8% y acumuló un avance de 27,3% en los primeros cuatro meses del año. La construcción, que había sufrido el freno de la obra pública a fines de 2023, creció 7,4% interanual. El comercio, por su parte, mejoró 6,7% y acumuló una suba de 8,3% en el cuatrimestre.

El reporte advirtió que, más allá de los datos positivos, será clave atender factores estructurales. “Una vez alcanzados nuevos máximos en el nivel de actividad, será fundamental incrementar la inversión, mejorar la productividad laboral y avanzar hacia un modelo fiscal más equilibrado”, señalaron.

Fuente: Bae Negocios