Representantes de las pymes cordobesas dieron su visión sobre la dinámica económica actual a nivel nacional y provincial. La presión impositiva y la falta de estabilidad fueron eje de las charlas
La industria y el comercio de Córdoba estuvieron representados en dos paneles centrales de la jornada.
El segundo titulado Hecho en Córdoba tuvo como protagonistas a Norberto José Delfino, gerente general de Servelec SRL y vicepresidente de la Cámara de Comercio Exterior de Córdoba y Diego Grión, socio gerente de Familia Grión SRL.
Viale remarcó que el sector del comercio está complicado. Por un lado “sufre la pérdida del poder adquisitivo de la gente a causa de la inflación” y por el otro cuenta que “somos objetos de varias presiones: la primera es la presión impositiva. Tenemos una provincia muy moderna, pero el impuesto a los IIBB es un impuesto muy pesado y con el agravante de que, prácticamente, el único sector que lo paga es el comercio”.
“La presión impositiva es tan grande que invita a la evasión y a la informalidad”, destacó.
Gialdi Svorcan, por su parte, se refirió al sector tecnológico. “Tenemos la suerte de tener una ley de economía del conocimiento, por lo que el tema impositivo no impacta tanto a este sector. El problema es el monetario. Nuestro sector está bien pago, con sueldos a valor dólar, pero no a valor del dólar blue, esto genera un problema para ser competitivos con el mercado laboral internacional”.
Delfino, por su parte, hizo un recorrido por la historia de su empresa, una fábrica de transformadores, y dio cuenta de la evolución que significó establecerse en mercados sofisticados a partir de la innovación.
Sobre la provincia señaló que es clave el fomento de la actividad de exportación e importación, porque siempre pensó que no se tiene que limitar a una actividad por sobre la otra y destacó los incentivos del gobierno provincial en el Programa Córdoba Exporta.
Grión también dio cuenta de los inicios de la empresa familiar de chacinados y embutidos y destacó la expansión territorial que lograron. “Hoy estamos en Salta y en Tierra del Fuego”, contó.
La planta tiene la objetivo de exportar como una alternativa real para poder salir de las dificultades económicas del país. El problema, como el de todos, es que “no tenemos un equilibrio económico y el tema de inflación va a impactar muy fuerte en el rubro fiambres”.
“Hoy se rumorea que no va a haber abastecimiento de tripa, algo que viene de otro país. Uno no sabe hasta que punto es especulación, pero eso nos llevaría a tener que frenar la producción”.
Fuente: El Cronista