El último estudio del organismo estadístico revela valores positivos en el intercambio
A pesar de que el año que pasó fue complejo en términos de intercambio comercial a nivel mundial, con un exorbitante aumento de los costos de fletes y contenedores, la Argentina tuvo algo de suerte: según el último informe dado a conocer por el Indec, en el tercer trimestre de 2021, el Índice de precios de las exportaciones registró un incremento de 31,0% respecto al mismo período del año anterior. “Así, persiste la mejora interanual observada desde el cuarto trimestre de 2020, en el que se interrumpió una sucesión de ocho trimestres de variaciones interanuales negativas. El Indice de precios de las importaciones aumentó 21,4% con relación al tercer trimestre del año anterior, y se mantiene la variación interanual positiva que se inició en el primer trimestre de este año”, difundió el organismo estadístico.
Balance
“El Índice de los términos del intercambio, que mide la relación entre los índices de precios de exportación y de importación, exhibió una mejora de 7,9% respecto al tercer trimestre de 2020, debido a que los precios de las exportaciones aumentaron en mayor medida que los de las importacione”, agregó el Indec.
En cuanto a las cantidades, el volumen de envíos al exterior ascendió 19,7% en la comparación interanual fue el tercer período consecutivo de variaciones positivas. Las compras, por su lado, registraron un aumento de 28,9%, “con lo cual representó el cuarto trimestre de incrementos interanuales”, informó el organismo oficial.
Como consecuencia, el valor de las exportaciones del tercer trimestre de 2021 subió 56,8% con relación al mismo período del año anterior, impulsado fundamentalmente por los mayores precios (31,0%) y, en menor medida, por las cantidades (19,7%). El predominio de los precios por sobre las cantidades forma parte de una tendencia que prevalece desde 2007.
En las exportaciones de los grandes rubros, todos los precios se incrementaron: combustibles y energía(86,0%); productos primarios (35,2%), manufacturas de origen agropecuario (31,5%) y, en menor medida, las manufacturas de origen industrial (17,2%).
Fuente: La Nación