La justicia analiza maniobras de empresas que giran divisas al exterior, presuntamente a mayores costos de los reales para acceder al valor oficial
Desde la Aduana estarían encontrando la huella del delito al chequear que quien paga no está relacionado a la operación, o bien que las certificaciones de flete resultan en sobrefacturaciones con fechas pre datadas o pos datadas.
La factura por el flete cobrado en origen (en lugar de ser pagado en el país) puede (o suele) venir con cargos en origen que no son reales, por lo que el costo termina siendo entre un 50 por ciento más caro del valor real del flete.
De acuerdo a la explicación de Trade News, se subfactura exportaciones para erosionar la base imponible para el cálculo de tributos aduaneros. Se sobrefactura importaciones para fugar dólares baratos y, luego, convertirlos al valor del paralelo.