El sector de la carga aérea global experimentó un crecimiento interanual del 11,4% en agosto de 2024, medido en toneladas-kilómetro de carga (CTK), consolidando así nueve meses consecutivos de expansión de dos dígitos. Este aumento ha sido impulsado en gran medida por el e-commerce y el cambio de cargas desde el transporte marítimo hacia la vía aérea, particularmente en las rutas que atraviesan Asia-Pacífico y América Latina, según un informe reciente de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA).
Desde el último trimestre de 2023, el incremento en las exportaciones de e-commerce de China, junto con la creciente demanda de soluciones de transporte multimodal que integran tráfico mar-aire, ha sido un factor clave para contrarrestar la baja en la actividad industrial, tradicionalmente un motor para la carga aérea. Este cambio en las dinámicas logísticas refleja una adaptación de la industria a las preferencias de los consumidores, quienes demandan plazos de entrega cada vez más cortos, apuntó Drewry.
Capacidad en desacuerdo con la demanda
A pesar del aumento en la demanda de carga aérea, la capacidad disponible de transporte, medida en toneladas-kilómetro de carga disponibles (ACTK), mostró un crecimiento más moderado, con un incremento de solo 6,2% interanual. Esta situación, que lleva seis meses consecutivos de crecimiento de capacidad por debajo del tráfico, genera presión en las cadenas de suministro. Las aerolíneas en África, Europa y Asia-Pacífico lideraron la expansión de capacidad, aunque esta sigue siendo insuficiente para cubrir la demanda en ascenso.
En este contexto, el mercado de la carga aérea se ha beneficiado de una mejora en los factores de ocupación, alcanzando un promedio global del 44,0% en agosto, 2,0 puntos porcentuales por encima del mismo mes en 2023. Europa registró el mayor nivel de ocupación, con un 50,1%, seguida de las aerolíneas de Asia-Pacífico y Medio Oriente, que alcanzaron el 46,6% y 44,5%, respectivamente.
Perspectivas de crecimiento y desafíos de capacidad
A futuro, se espera que la carga aérea mantenga una tendencia de crecimiento en el cuarto trimestre de 2024 y más allá, especialmente por la actividad en la temporada alta de e-commerce. Sin embargo, las limitaciones de capacidad de los fabricantes aeroespaciales podrían provocar cuellos de botella si la demanda sigue aumentando hasta 2025. Además, algunos cambios legislativos previstos en economías desarrolladas podrían impactar el e-commerce, lo que podría afectar indirectamente la demanda de carga aérea a largo plazo.
En términos de tarifas, la comparación sigue siendo favorable para la carga aérea, ya que los elevados precios del transporte marítimo de contenedores continúan posicionándola como una alternativa competitiva.
Por Mundo Maritimo