De ese total, u$s2.000 millones corresponden solo a junio. En los primeros seis meses del año hubo un superávit de caja de casi u$s8.900 millones. Las compras de energía crecieron 166% en junio
El refuerzo de los controles que está llevando el Banco Central sobre los dólares destinados a pagar importaciones tuvo resultados en el primer semestre del año: la autoridad monetaria logró que las empresas importadoras difieran pagos al exterior por u$s6.000 millones, y de ellos u$s2.000 millones fueron solo en el sexto mes.
En el caso de las empresas multinacionales los problemas son más acotados, porque es común que haya operaciones entre subsidiarias de un mismo grupo, por lo cual se asegura el crédito. También cuentan con mayor espalda financiera para operar con bancos en el exterior y asumir el costo.
En el caso de las pymes, hay un grupo de empresas que son representantes de marcas y productos del exterior, con décadas de trayectoria en el mercado argentino que puede negociar con sus proveedores plazos más extendidos de los normales del comercio exterior porque tienen crédito suficiente. Los proveedores saben que las operaciones con Argentina cíclicamente presentan estas clase de problemas. El inconveniente se manifiesta para las pymes que tienen que comprar insumos o bienes, y cuentan con menos trayectoria o son representantes.
Desde que el 27 de junio cuando el BCRA puso en marcha la resolución 7532, que obligó a las empresas que importan productos con Licencias no Automáticas a postergar pagos por 180 días, los controles se han profundizado al máximo. Hay empresas que se han quejado de que aunque cuentan con la autorización de la Secretaría de Industria para importar, en el BCRA no le venden dólares porque tienen completo el cupo de divisas del año.
En tanto en el sexto mes del año, previo a la medida del BCRA, el INDEC informó importaciones por u$s8.547 millones, pero el BCRA registró ventas por u$s6.585 millones, es decir u$s1.962 millones menos. Por el lado de las exportaciones, el organismo estadístico informó u$s8.432 millones, y el Central, 8.263 millones, es decir u$s169 millones más. En el caso de las ventas las diferencias no son relevantes.
De ese modo, aunque para las declaraciones aduaneras en junio hubo un déficit de balanza comercial de u$s115 millones, en realidad, el flujo de dólares en el mercado de transables fue positivo en u$s1.678 millones.
La cantidad de dólares que se destinaron a pagar importaciones de energía fue en junio de u$s1.965 millones, u$s579 millones en energía eléctrica, u$s34 millones en gas y u$s1.352 millones en petróleo. En mayo habían sido u$s1.308 millones, u$s1.088 millones en petróleo, u$s17 millones en gas, y u$s203 millones en energía eléctrica.
Más allá de la estacionalidad que se menciona como el principal problema por la escasez de dólares, en junio del año pasado las importaciones de petróleo demandaron solo u$s508 millones. Se puede asumir que el incremento de los precios internacionales por la invasión de Rusia a Ucrania es responsable de un incremento del 166% en el valor de las compras externas del sector.